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Carabina PCP Snowpeak AP900 Carbono sintética con regulador 4.5 mm
Carabina Snowpeak AP900 4,5 mm
La Snowpeak AP900 es una carabina PCP de alto rendimiento, diseñada para tiradores que buscan precisión, ligereza y fiabilidad. Este modelo destaca por su elegante acabado completamente negro y una serie de características técnicas que la convierten en una opción destacada para el tiro deportivo:
Calibre: 4,5 mm (.177)
Potencia: 24 julios
Botella de carbono: 350 cc a 250 bares, que proporciona mayor autonomía y reduce el peso total del arma
Regulador de presión integrado: garantiza una presión constante para disparos más precisos
Cañón estriado de acero: 310 mm de longitud, recubierto externamente con fibra de carbono para mayor durabilidad
Culata sintética abatible: ergonómica y ligera, facilita el transporte y almacenamiento
Sistema de carga: cerrojo manual
Cargadores incluidos: monotiro y multitiro (12 balines en calibre 4,5 mm)
Silenciador incorporado: reduce significativamente el ruido del disparo
Gatillo ajustable: permite personalizar la sensibilidad según las preferencias del tirador
Seguro manual: para un manejo más seguro
Raíl Picatinny: para la instalación de accesorios ópticos
Dimensiones: longitud total de 885 mm, altura de 180 mm y ancho de 61 mm
Peso: aproximadamente 2,2 kg
Esta carabina combina tecnología avanzada y diseño funcional, ofreciendo una experiencia de tiro superior. Su ligereza y ergonomía la hacen ideal tanto para sesiones prolongadas de tiro como para quienes buscan un arma fácil de manejar y transportar.
Ventajas de una carabina PCP con regulador
1. Mayor consistencia en los disparos
El regulador mantiene la misma presión de salida en cada disparo, independientemente de cuánto aire quede en la botella.
Esto se traduce en velocidades constantes de los balines y, por tanto, agrupaciones más cerradas (mejor precisión).
2. Precisión mejorada
La consistencia en la presión resulta en un comportamiento más predecible del balín.
Esto es clave especialmente en tiro deportivo o caza de precisión, donde cada milímetro cuenta.
3. Más disparos útiles por carga
Al aprovechar mejor el aire comprimido, el regulador permite una mayor cantidad de disparos dentro de un rango óptimo de presión.
En modelos sin regulador, la presión disminuye más rápidamente y con menos control.
4. Menor sensibilidad a cambios de presión
En armas sin regulador, los primeros disparos pueden ser demasiado potentes y los últimos demasiado débiles.
Con un regulador, el rendimiento se mantiene estable durante más tiempo, incluso si la presión en la botella varía.
5. Menor desgaste del sistema
Al evitar picos de presión innecesarios, el regulador contribuye a prolongar la vida útil de válvulas y otros componentes internos.
6. Más facilidad para afinar el arma
Algunos reguladores son ajustables, lo que permite al usuario configurar la presión de funcionamiento para adaptarse a distintos tipos de balines o necesidades específicas.