Moldes Plomo

Los moldes para proyectiles de plomo, también conocidos por turquesas, son lla herramienta imprescindible para dar forma a nuestras balas a partir del plomo fundido. 

En BlackRecon encontrarás un amplísimo catálogo de moldes para avancarga, moldes para rifle, moldes para pistola y moldes para escopeta. Estos moldes o turquesas están fabricados en acero o aluminio y son capaces de fraguar diferentes cantidades de proyectiles al mismo tiempo.

Cuando se ha realizado el proceso de fundición del plomo con el hornillo, se procede a darle forma al proyectil. Para ello necesitamos un molde adecuado, también llamado turquesa. El molde varía en función del calibre y de la forma que queremos para nuestras balas. En esta sección, te separamos los diferentes moldes entre el tipo de arma, para que encuentres el adecuado para ti:

Moldes para escopeta

Encuentra aquí el molde perfecto para fabricar tus propias bolas y balas para tu calibre de escopeta:

Ver Moldes escopeta

Moldes para arma corta y arma larga

Los moldes para cartuchería metálica componen una de las más grandes variedades. Podrás darle la forma que mejor se ajuste a tu proyectil y el peso adecuado para conseguir la munición perfecta:

Ver Moldes Cartuchería metálica


Moldes para balas avancarga

Los moldes más utilizados son los de avancarga, por la facilidad que ofrecen de conseguir munición para este tipo de armas:

Ver Moldes avancarga

Fabricar balas de plomo

Fabricar balas de plomo, aunque no es una tarea excesivamente compleja, sí que requiere de experiencia y de contar con las herramientas y accesorios adecuados. Con esto queremos decir que fabricar una bala no es difícil, lo complicado es que sea precisa. Uno de los aspectos cruciales es el manejo del plomo fundente y su moldeado en una turquesa o molde de calidad. Teniendo siempre en cuenta la aleación más comveniente y la temperatura a la hora de fraguar del plomo y el molde.

Los moldes forman parte de este modo, de un elemento esencial para la creación de tus propios proyectiles, ya que son la herramienta con la que se consigue dar la forma al plomo que hemos fundidio previamente. Dichos moldes, reciben a su vez el nombre de turquesas entre gran parte de los tiradores y cazadores que realizan este proceso.

Las turquesas suelen estar hechas de dos materiales, aluminio o acero. Por regla general, las de acero están consideradas las de mayor calidad y duración entre los usuarios. Si bien es cierto, grandes profesionales que se han dedicado de pleno al mundo de la fundición y la recarga de munición, siempre han dicho que los moldes de aluminio son los mejores para la munición con forma de bolas.

El mayor problema de los moldes de aluminio, radica en su tiempo de uso y en la rigurosa limpieza y mantenimiento que requieren, ya que si esto no se lleva a cabo de forma exhaustiva, nuestros proyectiles se verán afectados y con ello, la precisión de nuestro disparo.

Otro aspecto importante que se debe tener en cuenta a la hora de utilizar nuestros moldes, es llevarlos a la temperatura correcta antes de pasar el plomo fundido a estos. El plomo adquiere su estado de fundición adecuado para verterlo sobre el molde cuando está a una temperatura entorno a los 400 ºC.

Por ello, en el caso de los moldes de aluminio se recomienda justo antes de proceder con el uso del molde realizar el calentamiento de este, aprovechando su alta conductividad térmica. Para ello se introduce una punta del molde en el hornillo de fundición y se le lleva aproximádamente a la mitad de temperatura a la que se encuentra el plomo fundido. Es decir. si nuestro molde es de aluminio, antes de pasar el plomo fundido que se encuentra a 400º, nuestro molde deberá alcanzar la temperatura de 200º. 

Por otro lado, si el molde es de acero, NO se debe hacer este proceso. El molde se utilizará en su temperatura ambiente. Desechando las primeras tandas de proyectiles, hasta que el molde de acero alcance la temperatura adecuada. Algunos usuarios, para acelerar el proceso y disminuir el número de proyectiles a desechar, calientan con un soplete el molde de acero. Una práctica NO RECOMENDADA y que ANULA LA GARANTíA del mismo, ya que requiere de mucha experiencia y puede dañar la turquesa de forma irremediable.


Moldes para fabricar proyectiles de plomo

Los moldes para fabricar proyectiles requieren de cuidados para que obtengamos óptimos resultados en cuanto a precisión. La turquesa debe estar completamente limpia y no contar con ninguna impureza de restos de plomo, correspondientes a fabricaciones anteriores. Además del cuidado en las temperaturas de manipulación del plomo y moldes que hemos comentado anteriormente. No seguir estas pautas, nos llevará a proyectiles defectuosos en sus formas y que por tanto carecerán de precisión.

Existen diferentes tipos de moldes, en cuanto al número de balas que simultáneamente pueden fraguar. Algunos de estos moldes o turquesas permiten fabricar más de dos proyectiles simultáneamente, que es lo más habitual. 

La fabricación de proyectiles proporciona varias ventajas, por una parte, son la solución para aquellos cartuchos obsoletos para los que no es posible encontrar balas. Por otra, también es útil para aquellos que ante una oferta limitada busquen proyectiles de formas específicas o pesos determinados para su arma. Ahora bien, es un entretenimiento para aficionados meticulosos y perfeccionistas, porque aunque es relativamente fácil fabricar un proyectil, resulta algo complicado que sea muy preciso.

moldes lee de varias cavidades